viernes, 19 de abril de 2013

PERDONA, ¿Y TÚ QUIÉN ERES?

Esto es lo que se pregunta una mujer un buen día, cuando una mañana al despertar, al abrir un ojo, lo primero que ve es a un tipo “triste” con poco pelo, entrado en kilos  con rostro desencajado y lo peor de todo, con un estado de ánimo abandonado. Se encuentra extraña, desorientada, ese persona que se observa al otro lado de la cama, no se asemeja en nada al hombre con el que se casó, hasta tal punto que decidió compartir el resto de su vida. ¿Qué ha ocurrido? ¿La culpa es de ella? ¿Dónde está aquel hombre que, antes de casarse hacía ejercicio, ajeno a la basura comida y se preocupaba por su salud?

Este post no va de hacer una crítica a las personas con sobrepeso, con poco pelo o de cara “pálida” sino de la relajación o acomodación cuando conseguimos el objetivo deseado, pensando, cayendo en el error de que vas a permanecer igual para el resto de tu vida. Llevado al terreno profesional, es obvio observar cómo desde niños nos preparamos, vamos a la Universidad, aprendemos idiomas, cursamos posgrados, hacemos prácticas hasta que, por fin, llega la oportunidad de trabajar. Un año después notamos cómo el confort ha llegado a nuestra vida, nos conformamos convirtiendo toda la ilusión inicial en monotonía y rutina. Ahora es ansiedad, malas caras... Treinta años después, eres ese marido con cara triste, que va al trabajo con trajes brillantes que no sabe combinar, “camisas de manga corta” y  corbatas ya anudadas.

¿Sabéis qué os digo? Que yo me niego totalmente a convertirme en esa persona. Cada día en el trabajo daré el 400%. No sé cuánto viviré pero lo haré como si cada día fuera el último. No he llegado hasta aquí para ahora dedicarme a observar.

Para concluir la semana os dejo un vídeo para que reflexionemos junto con una frase extraída de la película "En busca de la felicidad" , que cada uno de nosotros deberíamos repetir cada mañana al frente del espejo

Muchas gracias a todos por seguir este proyecto. He de reconocer que estoy recibiendo más visitas de las esperadas, así que de nuevo daros las GRACIAS.

“Nunca dejes que nadie te diga que no puedes hacer algo. Ni siquiera yo. Si tienes un sueño, vé a por él. La gente que no lo consiguió te dirá que no lo lograrás, pero si tienes un sueño, persíguelo, y punto”


No hay comentarios:

Publicar un comentario